Elena Poniatwska y Elena Garro en 1968.
Foto de Héctor García.
Por Lisardo Enríquez
L.
Hay diferentes tipos de
periodistas y de escritores. Elena Poniatowska, como ella misma lo dice, ha
trabajado desde la indignación y la denuncia. Porque en América Latina y en nuestro
caso en México, los problemas de la pobreza, la marginación, el analfabetismo,
la corrupción, la impunidad, la violencia, el autoritarismo y muchos más, hacen
que un periodista y un escritor sensible tenga que hacer evidente esta realidad
mediante las alternativas a su alcance.
Elena Poniatowska Amor nació
en París. Llegó a México a los diez años de edad, en 1942. Los acontecimientos
de la Segunda Guerra Mundial obligaron a sus padres a tomar la decisión de
venir a México, donde Elena tenía familiares por parte de su madre. En 1969 se
nacionalizó mexicana. Estudió en colegios de los Estados Unidos y a su regreso colaboró en periódicos nacionales primero y
después también en extranjeros.
Aparte del periodismo, ha
dedicado buena parte de su tiempo a realizar entrevistas a personajes muy
diversos. De ello publicó dos libros. Sin embargo, su labor de escritora ha ido
mucho más allá. Cuenta con una larga producción de obras entre las cuales hay
cuento, novela y biografía. Por ejemplo, a raíz de una larga entrevista a una
mujer oaxaqueña surgió su novela Hasta no
verte Jesús mío.
Seguramente la obra más
difundida de esta escritora es La Noche
de Tlatelolco, constituida con Testimonios
de historia oral y de la que se han hecho innumerables ediciones. Por
supuesto, estos testimonios corresponden al Movimiento Estudiantil Mexicano de
1968. La primera edición del libro fue del mes de febrero de 1971. En una de
las primeras páginas recoge palabras de Luis González de Alba, delegado de la
Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM ante el Consejo Nacional de Huelga,
preso en Lecumberri cuando lo entrevistó la autora. Dice: “Hay un México antes
del Movimiento Estudiantil y otro después de 1968. Tlatelolco es la escisión
entre los dos Méxicos”. En La Noche de Tlatelolco está la indignación de
quienes aportan su testimonio, incluyendo a la autora.
Por la identificación con su
esposo, el astrónomo Guillermo Haro Barraza, en su producción hay dos libros
que abordan el tema relacionado con la observación del firmamento. El primero
es la novela La piel del cielo editada en 2001. El personaje
principal es Lorenzo de Tena que bien puede verse como el astrónomo del que
aquí se habla, diciendo: “Soy un astrónomo con buena estrella”. Pero en 2013 se
publica su más reciente obra titulada El
universo o nada. Biografía del
estrellero Guillermo Haro, con el cual
da cuenta de esos intereses científicos.
En el mismo 2013 fue galardonada con el Premio Cervantes de Literatura, el más
importante en lengua española, que le fue entregado en el mes de abril de este
año.
Elena Poniatowska ha
participado activamente en la defensa de las mejores causas sociales del pueblo
mexicano. Con ello, y con muchos de sus escritos, ha manifestado su indignación
y su denuncia. Pero también ha sido una mujer llena de amor, haciendo honor a
su segundo apellido, el que le viene de estas tierras.
Publicado el 23 de junio de 2014 en Diario de Xalapa.